Una operación en el Hospital de León
Castilla y León recibe casi 13,5 millones para la atención primaria, la salud mental y el plan de prevención del suicidio
Una cuantía que ha sido autorizada por el Consejo de Ministros.
Más noticias: Más psicólogos en el medio rural y hospitales de día: las claves de la nueva Estrategia de Salud Mental de Castilla y León
El Consejo de Ministros ha aprobado este martes el reparto entre las comunidades autónomas de un paquete de 229 millones de euros destinados al refuerzo de la Atención Primaria y la salud mental y a la puesta en marcha del primer Plan de Prevención del Suicidio.
En el cómputo total, la Comunidad va a recibir una suma de casi 13,5 millones de euros. Concretamente, según han dado a conocer, el Gobierno destina dos millones de euros a reforzar la salud mental y 940.000 al primer Plan de Prevención del Suicidio en 2025.
Así como más de 10,5 millones para reforzar la Atención Primaria. La dotación presupuestaria busca "impulsar la mejora de los servicios" a través de diversas vías como la ampliación de los procedimientos diagnósticos.
Así como la optimización de procesos administrativos, el impulso de soluciones de inteligencia artificial, renovación de infraestructuras y equipamiento clínico, fomento de las escuelas de salud para la ciudadanía, implementación de programas de detección temprana de violencia de género, interoperabilidad de las historias de salud digitales.
El fomento de proyectos orientads a garantizar el acceso al sistema nacional de salud y la vinculación con herramientas de recomendación de activos para la salud.
En cuanto al plan de acción para mejorar la salud mental, hay ocho líneas estratégicas centradas en reforzar los recursos humanos, plantear alternativas a la institucionalización, programar actividades de lucha contra el estigma, optimizar los tratamientos, atender a los colectivos vulnerables,además de a niños y adolescentes.
Desarrollar sistemas de información en salud mental y financiar actuaciones que promuevan el acceso a un empleo digno y el mantenimiento laboral de personas con trastorno mental.
Por último, en cuanto al Plan de Prevención del Suicidio está previsto impulsar campañas de concienciación para promover el conocimiento sobre la conducta suicida, desarrollar programas comunitarios centrados en fortalecer el bienestar emocional de personas mayores, colectivos LGTBIQ+ y ciudadanos en situación de exclusión social.
Promover la reforma de las urgencias para mejorar la accesibilidad y aceptabilidad de las personas en crisis de salud mental, y fomentar la alineación de los planes autonómicos y el estatal para que haya “coherencia en las actuaciones”.
