
"Marco 3" de coto medieval de Teo.
Los marcos de coto de Teo (A Coruña): vestigios de la Edad Media a un paso de Santiago
Descubiertos por varios investigadores hace apenas dos décadas, estas piedras centenarias del siglo XII delimitaban antiguos territorios
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El municipio coruñés de Teo, situado a escasos kilómetros de Santiago de Compostela, ha estado siempre ligado a la historia de la capital gallega. Tanto, que su nombre aparece en crónicas y leyendas jacobeas que hablan de la época medieval y reflejan el poder que tenía la iglesia entonces.

Santiago de Compostela.
Esta época todavía sigue muy presente en la zona gracias a numerosas construcciones. La iglesia románica y el monasterio de Santa María de Lampai, edificados en tiempos del arzobispo Xelmírez, son ejemplos de ello. También destacan la residencia de los arzobispos compostelanos y el desaparecido convento de San Paio en el Monte Beitureira, donde los Condes de Altamira recaudaban impuestos.

Andrés Pena, Jorge Guitián, Luis Monteagudo y Alfredo Erias.
Además, a principios de siglo, los investigadores Jorge Guitián Castromil y Xóan Guitián Rivera descubrieron en Teo unos curiosos marcos de coto del periodo medieval. Un hallazgo sobre el que también escribió López Alsina, que cuenta con una de las investigaciones más destacadas sobre el tema.
El origen de los marcos
Cuenta Pablo N. Sanmartín, responsable del Archivo Municipal de Teo, que de acuerdo con López Alsina, "este couto pode considerarse un dos máis importantes da península polo feito da localización in situ dos marcos, a súa relación co documento do tumbo B do Arquivo da Catedral e da persoa que os mandou colocar, Alfonso VII”.
Y es que sobre estos marcos se encuentran los primeros escritos que se conservan en Teo, que no están en pergaminos ni códices, sino grabados en piedra. Delimitaban la antigua villae de Pedrouso Lampai y marcaban los límites de los terrenos que el rey Alfonso VII donó en 1156 a su vasallo Sancho Yáñez en reconocimiento por sus servicios.
En la época medieval, la delimitación del espacio era fundamental. Las tierras eran fuente de poder y riqueza, y establecer sus límites evitaba disputas entre señoríos. Los marcos servían como referencia visual, pero también como prueba en un tiempo en el que la propiedad estaba determinada por títulos que otorgaba la nobleza y la monarquía.

'Marco 1' de Teo.
En la actualidad, se conservan tres marcos del coto de Lampai. Entre ellos, el más representativo es el denominado 'marco 1'. "O marco máis importante é o do Porto de Lampai pois é o único coa inscrición en tres caras no linde entre Teo e Padrón e tamén é o mellor conservado. Figura na ruta homologada 'Per caminho de Lampai' e está ben conservado, limpo e periodicamente revisado polo Concello de Teo”, explica Pablo.
El significado de las inscripciones
Uno de los aspectos más fascinantes de estos marcos es la inscripción que aún se conserva en el marco 1. Según los investigadores, su tipografía, la precisión del trazo, los signos de puntuación y las abreviaturas confirman su origen medieval.
En su estudio, los Guitián explican que, al hacer la transcripción, la primera dificultad que encontraron fue determinar cuál era la cara inicial del grabado. Fue un crismón, un símbolo cristiano utilizado al principio de muchas inscripciones medievales, lo que les permitió establecer el orden correcto de la lectura.
El texto, escrito en latín, dice: "era MCXCIV et quotum I kalendas septemberis cum auctoritatem imperatoris et omnibus intervinientibus patronim statuit". Lo que significa: "año 1156, en el primer día de las calendas de septiembre, con la autoridad del Emperador y de todos los asistentes, pongo este pedrón".
Esta inscripción explica que el "emperador", Alfonso VII, ordenó colocar el marco en este lugar, aunque sin especificar qué territorio estaba delimitando exactamente.

"Marco 2" de Teo.
Los marcos 2 y 3, señalan los investigadores, no se conservan tan bien. De sus inscripciones tan solo pudieron sacar la fórmula "patronim statuit". Esto podría traducirse como "el patrón estableció" o "el señor dispuso”", en referencia a Alfonso VII.
El marco 2 se encuentra en las proximidades de la aldea de Quiruga, en la parroquia de Santa María de Cruces, mientras que el marco 3 está situado cerca de la Porta dos Mariños.
La importancia de la investigación
"Este acoutamento foi coñecido á raíz do artigo dos Guitián, porén a veciñanza de Lampai coñecía a zona e o marco dende tempos inmemoriais pero sempre pensaron que era un miliario romano. Consérvanse fotos no arquivo municipal dos anos 30 das excursións que facían os e as veciñas ata este lugar moi preto dos muíños das aldeas da Silva e A Grela”, cuenta el responsable del Archivo.
Tras la investigación publicada por los Guitián en el Anuario Brigantino, el Concello valoró trasladar los marcos a otro lugar para preservarlos mejor. Sin embargo, la Dirección Xeral de Patrimonio de la Xunta se opuso a esta medida.
Este traslado hacía que los marcos perdieran su sentido original, delimitar el coto cedido por Alfonso VII a Sancho Yáñez. Por ello, las tres piezas todavía se encuentran en su ubicación original.
Además, se habla sobre la posibilidad de una cuarta pieza: "É unha teoría moi factible pois se analizas de vagar a situación dos outros tres semella, e incluso de dous máis posiblemente tamén medievais, é evidente que falta outro marco máis para pechar o linde".
Asociaciones y expertos reivindican la importancia de cuidarlos y de tratar de conservarlos en el mejor estado posible, pues se trata de una parte más de la historia de nuestra comunidad.