Adiós a las polillas: el invento de menos de 22 euros que las captura en España de forma eficaz sin usar químicos

España se está enfrentando a una plaga de polillas gigantes, aunque las de menor tamaño también están haciendo acto de presencia en las casas tras la llegada del calor. Por suerte, y al igual que con los mosquitos y las avispas, existen inventos que acaban con ellas fácilmente.

Se trata de Gardigo, una trampa ideada para polillas del Boj —una especie exótica invasora nativa de Asia que se ha extendido por Europa— que se puede comprar en Amazon por tan solo 21,99 euros. Un producto que es fácil de usar y no emplea productos químicos.

La polilla del Boj es una especie polífaga que se alimenta principalmente de las hojas de los arbustos de boj, de ahí su nombre. Con Gardigo se puede atrapar a estos insectos eficazmente, sin insecticida y a tiempo para evitar la aparición de nuevas larvas.

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Gardigo es una trampa compacta que tiene forma de lámpara y unas medidas de 22 centímetros de alto y 11 centímetros de diámetro. Este invento facilita el control de infestaciones y proporciona una indicación de cuándo se espera que las orugas se coman los bojes.

Una de sus principales características es su funcionamiento, ya que es sencillo. Incluye cuatro dispensadores de atrayentes que se colocan en su interior y que están creados con feromonas. De esta manera, atrae y atrapa a los machos.

La trampa para polillas Gardigo. Amazon Omicrono

Así las polillas hembras no pueden poner huevos, por lo que nacen menos larvas dañinas, que son las responsables de devorar por completo los bojes; y siendo eliminadas permanentemente del hogar.

Gardigo también destaca por ser ecológica, ya que es una trampa antipolillas 100% libre de insecticida. Por lo que es segura para humanos y mascotas, así como para el jardín.

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La trampa Gardigo también es eficaz, estable y reutilizable, y una sola de ellas es capaz de cubrir un área de hasta 180 metros cuadrados. Este invento también se puede usar para acebos y evónimos.

Gardigo es una trampa que se puede colocar de dos formas distintas. La primera es colgada con un cordón que se incluye en la caja, y la segunda es clavándola a un palo para plantas mediante una hendidura en la base.

Esta trampa viene igualmente con un diagrama de infestación con el que el usuario puede determinar, según la cantidad de polillas machos capturados, el momento adecuado para tomar medidas preventivas.

Una vez capturadas las polillas, para acabar con ellas se pueden vertir en una bolsa para desecharlas con cuidado para que no escapen. Incluso la firma señala que se puede emplear agua con detergente.