
La eurodiputada y exministra de Igualdad Irene Montero, este domigno durante el acto celebrado por Podemos en Madrid. Efe
Podemos activa el modo electoral con Irene Montero como candidata y amenaza con tumbar los pactos PSOE-Junts
El partido de Ione Belarra complica la legislatura a Sánchez: no apoyará los Presupuestos ni el traspaso de competencias de inmigración a Cataluña.
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Podemos se pone en modo electoral, lanza a la exministra Irene Montero como candidata a las próximas elecciones generales y se abre a alcanzar alianzas con otras fuerzas de izquierdas en torno al "No a la guerra"... mientras amenaza con poner en jaque la legislatura de Pedro Sánchez tumbando sus acuerdos con Carles Puigdemont.
La premura con la que el partido de Ione Belarra ha designado de forma oficiosa a su candidata a la Presidencia del Gobierno indica que no da crédito a la promesa de Pedro Sánchez de agotar la legislatura hasta 2027.
O que no descarta forzar su final de forma abrupta, como ya ha dejado entrever en los últimos meses: Podemos ha puesto condiciones inasumibles para apoyar los Presupuestos Generales del Estado de 2025, ha impugnado los principales acuerdos del Gobierno con Junts (como el traspaso de las competencias de inmigración a Cataluña) y ha reiterado de nuevo, este fin de semana, su rechazo al aumento del gasto militar que Sánchez ha prometido a la OTAN.

EFE
No es casual que Podemos haya anunciado, por sorpresa, la candidatura de Irene Montero en el acto que celebraba este domingo en Madrid bajo el lema Por la paz y contra el régimen de guerra.
El partido morado pretende hacer del "no a la guerra" el principal hilo conductor para tejer nuevas alianzas electorales, tras descartar cualquier acuerdo con Sumar (pero no con algunas de las formaciones que concurrieron a los comicios del 23-J bajo esta marca).
Durante el acto, la secretaria general del partido, Ione Belarra, pidió a Montero que lidere una candidatura que no sólo incluya a los morados, sino a todos los sectores de la sociedad que rechazan la actual escalada bélica de Europa y quieren que España "se vuelva a convertir en un referente de paz".
Irene Montero recogió el guante y se comprometió a "levantar una candidatura de paz, de esperanza y de más derechos".
Os pido que asumáis conmigo la tarea de levantar una candidatura de paz, de esperanza y de más derechos para las próximas elecciones generales.
— Podemos (@PODEMOS) April 6, 2025
Defender la paz es ahora la tarea más importante.
📽 @IreneMontero pic.twitter.com/LgEhus2fwi
Podemos marca así su terreno de juego. Arrebata al PSOE el histórico "No a la guerra" del segundo mandato de Aznar y cobra ventaja respecto a Sumar, abocado a un difícil equilibrio: pese a cuestionar públicamente el incremento del gasto militar, el partido de Yolanda Díaz se ve obligado a acatarlo como parte del Gobierno de coalición.
Mientras Podemos se activa para los próximos comicios, un posible adelanto electoral encontraría a Sumar sin bases y sin apenas estructura de partido: comenzó a ponerla en marcha el pasado fin de semana en su asamblea estatal, en la que Yolanda Díaz dio paso a una suerte de gestora en manos de Lara Hernández y Carlos Martín. Serán los encargados de intentar atar la frágil alianza de partidos que hoy corre el riesgo de desintegrarse.
Con sus cuatro diputados, ¿puede acelerar Podemos un adelanto electoral? En todo caso, puede poner las cosas aún más difíciles a Pedro Sánchez, que ya ha descartado someter a la votación del Congreso el aumento del gasto militar, porque sabe que no cuenta con el apoyo de la mayoría de sus socios parlamentarios.
Mientras José Luis Rodríguez Zapatero intenta encauzar en Suiza las relaciones del Gobierno con Puigdemont, como reconocía este domingo en una entrevista, Podemos puede sabotear sus acuerdos en el Congreso de los Diputados.
Ione Belarra ya ha adelantado que Podemos no apoyará el proyecto de ley que regulará la delegación de competencias de inmigración a la Generalitat, por considerar que el acuerdo alcanzado entre el PSOE y Junts tiene tintes "xenófobos".
Pablo Iglesias desvelaba este fin de semana, en otra entrevista, que "dirigentes de ERC han pedido en privado" a Podemos que tumbe la tramitación de esta norma. A su juicio, Junts reclama para Cataluña las "competencias integrales" sobre inmigración para "hacer daño", en su pugna con los independentistas de la Aliança Catalana, una formación abiertamente xenófoba.
Podemos ha sido más prudente en sus pronunciamientos sobre el cupo catalán prometido por Pedro Sánchez a ERC (y reclamado igualmente por Junts).
Aunque Ione Belarra ha considerado que la fórmula planteada es "una garantía de fracaso" y no puede responder a un "intercambio de cromos", sino que debe abordarse un nuevo modelo de financiación para todas las comunidades autónomas. La entrega de un concierto económico para Cataluña también ha provocado resquemores entre algunos miembros de Sumar, desde IU a Compromís.
Además de estos palos en las ruedas a los compromisos que los emisarios de Pedro Sánchez adquieren con Puigdemont en Suiza, vitales para prolongar la legislatura, Podemos ha puesto exigencias inasumibles para apoyar los Presupuestos Generales del Estado de 2025 (que el Gobierno ya descarta enviar a las Cortes).
Entre ellas, que el Gobierno rompa todas las relaciones diplomáticas con Israel y rebaje por ley un 40% el precio de los alquileres. Porque los cuatro diputados de Podemos siguen siendo decisivos para que el Gobierno apruebe en el Congreso cualquiera de sus iniciativas.
Y otra cuestión pendiente, sea cual sea la fecha fijada, es si Podemos concurrirá en solitario a las próximas elecciones generales. La fórmula lanzada por Irene Montero este domingo deja entrever que Podemos podría intentar atraerse a socios desencantados de Sumar, o bien incorporar a su candidatura a representantes de la sociedad civil, identificados con el "No a la guerra".
Durante la última semana, Pablo Iglesias (que sigue ejerciendo el liderazgo moral de Podemos, en la sombra, según otras interpretaciones) ha rechazado por completo la mano tendida que lanzó la asamblea estatal de Sumar para recuperar el diálogo entre ambas formaciones.
Proyecto "fallido" y "muerto"
A su juicio, Sumar es un proyecto "fallido" y "muerto"". Y considera que Yolanda Díaz no debe volver a presentarse a las elecciones: "Tendría poco sentido que descienda a los juegos del hambre como líder de un partido muy pequeño que tendría que negociar con otros partidos territoriales como Más Madrid, los Comunes, Compromís o IU".
Está por ver si Podemos puede recuperar el entendimiento con algunas de estas formaciones. No desde luego con Más Madrid, cuyos principales cuadros acompañaron a Íñigo Errejón (hoy apartado de la política entre acusaciones de acoso sexual) en su traumática escisión de Podemos.
Pablo Iglesias mantiene la máxima desconfianza hacia Enrique Santiago: durante su etapa como ministra de Derechos Sociales, Belarra lo destituyó como secretario de Estado, tras el fiasco del acuerdo alcanzado con otras fuerzas para las elecciones andaluzas de 2022.
Como antes Errejón y su equipo, Santiago pasó a engrosar la larga lista de "traidores" a Podemos. Pero el partido morado sí podría iniciar una aproximación al nuevo secretario general de IU, Antonio Maíllo, cuyas relaciones con la vicepresidenta Yolanda Díaz resultan cada vez más tensas.
El acuerdo con los Comunes no sería fácil, mientras su principal cabeza visible sea el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, plenamente identificado con Yolanda Díaz.
En su entrevista de este fin de semana con el diario independentista Ara, Pablo Iglesias presumió de que, en las elecciones europeas, la lista de Podemos encabezada por Irene Montero obtuvo más votos que los Comunes (representados por Sumar) en Cataluña. Y se mostró convencido de que lo mismo ocurriría en unas elecciones generales.