Raúl Nieto en su ganadería de Alaejos

Raúl Nieto en su ganadería de Alaejos Fotografía: Henar Merchán cedida a EL ESPAÑOL de Castilla y León

Valladolid

Raúl hace de un hobby su profesión al mando de una ganadería en un pueblo de Valladolid: "Mi vida es el toro"

Gestiona un negocio que, además, celebra también bodas, bautizos o comuniones en un entorno privilegiado.

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Alaejos es un municipio de la provincia de Valladolid que fue declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1997, con tres Monumentos BIC y que se encuentra situado al sur-oeste de la provincia, perteneciendo a la mancomunidad de tierras de Medina del Campo.

Es un lugar, que en la actualidad y según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) con 1.407 habitantes y que merece la pena visitar por su valor patrimonial, histórico y cultural.

Raúl Nieto es un vallisoletano, de 42 años, que nació en Valladolid y que, en la actualidad, vive en la localidad vallisoletana. Lleva desde 2014 como empresario taurino y su gestión está dedicada a la organización de festejos populares, fundamentalmente en las zonas próximas a su municipio.

Amante de montar a caballo y del toro, ha conseguido hacer de su hobby, su profesión y cuenta con una ganadería propia en el municipio pucelano que lleva el nombre de Equinotauro.

Raúl Nieto y uno de sus animales

Raúl Nieto y uno de sus animales Fotografía: Henar Merchán cedida a EL ESPAÑOL de Castilla y León

Su vida y la ganadería

Soy una persona que se ha hecho a sí mismo. Emprendedor, luchador y trabajador. Siempre he intentado cumplir mis sueños para conseguir hacer de mi hobby, mi profesión”, asegura, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León, Raúl Nieto.

El amante de montar a caballo y del mundo del toro decidió, hace cinco años y después de saber mucho del mundo y en el mundo con la organización de festejos populares, abrir su propia ganadería.

De pequeño quería ser torero. La ganadería la abrí hace justo cinco años. En 2020 y en plena pandemia del coronavirus por mi afición y después de mucha constancia y sacrificio lo que hace que cualquier logro y éxito sepa un poco mejor”, explica.

Sin antecedentes familiares pone en marcha la Ganadería Equinotauro en Alaejos que en la actualidad cuenta con más de 300 animales de lidia entre vacas, madres, sementales y toros.

La ganadería de Raúl Nieto llamada Equinotauro

La ganadería de Raúl Nieto llamada Equinotauro Fotografía: Henar Merchán cedida a EL ESPAÑOL de Castilla y León

El toro, su vida

“Cada día hago de todo en la ganadería. Desde preparar la comida para los animales, a primera hora de la mañana hasta organizar un festejo en el que se lidie alguna de las reses de mi ganadería”, asegura Raúl.

Nuestro entrevistado no duda en afirmar que “ama lo que hace”. “Mi vida es el toro”, apunta y disfruta porque de momento, y después de años de mucha lucha, su ganadería va viento en popa y a toda vela.

“La ganadería está muy bien y en crecimiento. Además, en la finca contamos con un espacio habilitado para celebrar todo tipo de eventos como bodas, bautizos o comuniones. Celebraciones en general”, explica.

Raúl Nieto en su ganadería

Raúl Nieto en su ganadería Fotografía: Henar Merchán cedida a EL ESPAÑOL de Castilla y León

Esto hace que más personas “puedan disfrutar” de su ganadería ubicada en un entorno privilegiado bajo el paraguas de un pueblo espectacular como es Alaejos, pese a que sacar un negocio adelante, sea el que sea, en el medio rural, no es sencillo.

“Nada es fácil en la vida. El futuro lo veo de manera esperanzadora. Espero poder vivir de mi pasión muchos años más”, finaliza Raúl Nieto.

Un ejemplo de convertir un hobby, una pasión, en una forma de vida.