Perro de asistencia, en una imagen de Shutterstock.
Aprueban este martes el anteproyecto de Ley de perros de asistencia para garantizar su acceso a sitios públicos
El documento establece una regulación clara y actualizada para garantizar la seguridad jurídica de las personas con discapacidad.
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La Generalitat da un paso adelante en la inclusión y accesibilidad de las personas con discapacidad con la finalización del anteproyecto de ley de perros de asistencia.
Esta nueva normativa actualiza y refuerza los derechos de quienes dependen de estos animales para su movilidad y seguridad en la vida cotidiana, garantizando su acceso a cualquier entorno.
El documento será remitido al Pleno del Consell del martes para su aprobación antes de pasar al Consell Jurídic Consultiu, que emitirá su dictamen previo a la tramitación parlamentaria.
A este respecto, la Vicepresidenta Primera y consellera de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda, Susana Camarero, ha destacado la importancia de esta actualización legislativa y ha señalado que “con esta nueva norma, garantizamos que todas las personas que necesiten un perro de asistencia cuenten con el respaldo legal adecuado”.
Susana Camarero ha remarcado el impacto positivo de esta reforma debido a que “este decreto representa un verdadero avance en la accesibilidad y la inclusión. Apostamos por una sociedad en la que todas las personas puedan ejercer sus derechos con garantías, sin restricciones ni discriminación”.
Novedades
La norma contempla la ampliación de los colectivos de personas beneficiarias, que incluyen, por ejemplo, los perros de asistencia para personas con trastornos del espectro autista; o los perros de apoyo en la detección precoz de la desconexión sensorial en enfermedades como la epilepsia o la diabetes.
Entre las novedades que introduce la nueva norma se encuentra la regulación de forma específica de los perros de asistencia en lo referente a su situación tras el cese de su actividad, asegurando su bienestar una vez finalizado su servicio.
La nueva normativa también establece una regulación clara y actualizada para garantizar la seguridad jurídica de las personas con discapacidad y de los distintos agentes implicados en el uso y formación de los perros de asistencia.
Como otras novedades destacan una diferenciación clara de los perros de asistencia, puesto que se establece un marco normativo que distingue estos animales de los de apoyo emocional y terapia asistida, evitando confusiones normativas.
Además, se regulan los requisitos específicos para el adiestramiento y certificación de los perros de asistencia, reforzando la profesionalización del sector y la calidad del servicio.
Igualmente, se amplían y detallan los derechos de acceso a espacios públicos, transportes y establecimientos, eliminando barreras para las personas usuarias de perros de asistencia.
También se creará un registro oficial de perros de asistencia, mejorando la trazabilidad y supervisión.
Con esta actualización, la Generalitat refuerza su compromiso con la autonomía de las personas con discapacidad y la construcción de un entorno accesible para todos.
